viernes, 29 de enero de 2010

El microcrédito, la redención de los pueblos del mundo


Los colegas y amigos de RADIO NEDERLAND WERELDOMROEP de Holanda, nos postean esta interesante reflexión sobre las ventajas y beneficios del microcrédito para las clases populares en el mundo, tema tan de moda por estos días en Colombia y latinoamérica.
El microfinanciamiento está destinado a los grupos más carenciados, generalmente mujeres en países en desarrollo, para ayudarles a levantar una empresa. Eso es lo que se piensa generalmente, pero descubrimos que no siempre es así. Porque también en Holanda se proporciona microcrédito, quizá no para sacar a alguna persona de la pobreza pero sí para ayudarle a construir una existencia independiente.

El Sr. Arnold Hoek, de 57 años, suena entusiasmado y motivado por teléfono. Una breve pregunta induce pronto una respuesta de varios minutos, tan complacido está por su nueva empresa de alquiler de velomotores Sólex en Markelo, provincia de Twente, que logró comenzar en abril del 2009 gracias a un microcrédito. Con gusto participa en el reportaje, para demostrar lo que ha significado el microfinanciamiento para su vida. Y, como corresponde a un hombre de negocios como él, también ve una oportunidad de publicidad gratuita para su empresa.

Hicieron una cita con él para un jueves por la mañana, cuando un grupo de jóvenes muchachas alquiló velomotores para una fiesta de despedida de soltera. No hay duda que esto les reportó bonitas imágenes. Arnold es, por su parte, un hombre entusiasta y conversador. Cuando empieza a hablar de su empresa se le ilumina el rostro con una sonrisa.
Sueño de juventud
Durante años tuvo que depender de un subsidio por incapacidad laboral y algunos ingresos adicionales que obtenía dando clases de pintura. Ahora, sin embargo, gracias al microcrédito, puede hacer lo que siempre ha deseado: trabajar con personas, en combinación con su sueño de juventud: la Sólex, la bicicleta negra de los años sesenta con un pequeño motor sobre la rueda delantera.

Lamentablemente, el clima no los acompañó. El sol brilló al comienzo de la mañana pero de vez en cuando cayeron aguaceros. Un tiempo típicamente holandés. Pero, por suerte, no arruinó la diversión. Las jóvenes saludaron alegres a la cámara y aceleraron la marcha. Arnold disfrutó, visiblemente. Pero, en el entusiasmo por contarles historias a los periodistas y a las muchachas, y las actividades de grabación de vídeo, se olvidó de llenar el tanque de una de las bicicletas. Al final del recorrido tuvo que subirse a una Sólex para rescatar a una de las ciclistas y remolcarla de regreso a Markelo. Pero eso también les proporcionó bonitas imágenes.

Entusiasmo
Ante tanto entusiasmo casi se olvidaría uno que para Arnold Hoek se trata de un asunto serio. Sin microcrédito estaría en casa, inactivo y quizá dependiendo por el resto de su vida del subsidio estatal. Porque después de su divorcio, su situación financiera se resintió y no posee una vivienda que pueda ofrecer como fianza para un crédito. Además, a los 57 años, tiene pocas posibilidades en el mercado laboral.

Quizá no sea esto lo que contempla Su Alteza Real la princesa Máxima de Holanda, como asesora de la ONU sobre microfinanciamiento: una posibilidad para que los más pobres puedan construir su existencia. Quizá sólo por el hecho de que, en este caso, se trata de la no despreciable cantidad de 20.000 euros. Pero para Arnold Hoek, como para las personas en los países en desarrollo, el microcrédito es indudablemente, una oportunidad para un futuro mejor.

miércoles, 13 de enero de 2010

Terremoto en Haití


La dimensión de la tragedia provocada por el sismo de magnitud 7 en la escala de Richter que arrasó Puerto Príncipe ayer, martes 12 de Enero de 2010, comenzó a emerger este miércoles 13 con dantescas informaciones sobre cálculos de tres millones de damnificados, cien mil muertos y desaparecidos, incluidos varios miembros de la misión de la ONU y centenares de heridos en las peores condiciones de atención.

La parte baja de Puerto Príncipe fue "completamente destruida" por el sismo del martes en Haití, mientras el resto de la capital, en las colinas que la rodean, "se salvó un poco", afirmó ante la cámara de Diputados el canciller francés Bernard Kouchner.

El palacio presidencial, la sede de la ONU, varios ministerios, la catedral, el arzobispado y un hotel de lujo, entre cientos de edificios más, se derrumbaron en esta capital de más de dos millones de habitantes por el potente sismo, que fue seguido de un par de réplicas de magnitud 5,9 y 5,5 grados de magnitud.

El presidente René Preval y su esposa sobrevivieron al derrumbe del palacio presidencial, aseguró Robert Manuel, embajador de Haití en México, pero el arzobispo de Puerto Príncipe, monseñor Serge Miot, falleció en el derrumbe del arzobispado, se informó en Roma.


El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon afirmó que "los servicios básicos como agua y electricidad han colapsado casi totalmente. Aún debemos establecer el número de muertos o heridos, que consideramos que podrían ser cientos".

En la sede de la ONU, por lo menos cinco personas murieron y entre 115 y 200 empleados expatriados de la ONU están desaparecidos tras el sismo devastador que golpeó Haití, informó Elisabeth Byrs, portavoz de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU.

Unas 200 personas estarían sepultadas bajo los escombros del hotel Le Montana, uno de los más lujosos de la ciudad, indicó el secretario francés de Cooperación, Alain Joyandet.

De diferentes capitales comenzó a informarse sobre muertes y desapariciones de efectivos de la Misión de Estabilización de la ONU en Haití (Minustah), cuyo jefe civil, el tunecino Hedi Annabi, al igual que las personas que estaban con él en el edificio de la ONU, habrían muerto, indicó el canciller francés, Bernard Kouchner.

Entre los contingentes latinoamericanos de la Minustah se confirmó hasta ahora la muerte de cuatro militares brasileños y de un argentino.

También murieron ocho cascos azules de China (país que dio parte además de diez desaparecidos) y tres de Jordania.

En Chile se informó de la desaparición de la esposa del general chileno Ricardo Toro, segundo comandante de las Fuerzas de Paz de Chile desplegadas en ese país, y de una funcionaria chilena de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas, Andrea Loi.

La Cancillería brasileña informó de la muerte de Zilda Arns, una brasileña dedicada a los derechos de la infancia, hermana del ex cardenal de Sao Paulo, Paulo Evaristo Arns.

El Instituto Geofísico estadounidense (USGS) informó que 24 fuertes réplicas sacudieron el país, tras el sismo de 7,0 de magnitud que se registró a las 16H53 locales (21H53 GMT) del martes.

El papa Benedicto XVI apeló a la "generosidad de todos" para hacer frente a la "dramática situación" que viven los siniestrados.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que su país está dispuesto a enviar ayuda a Haití y este miércoles debía sostener una reunión de urgencia sobre el tema. Washington anunció además el envío de un primer equipo de rescatistas para ayudar a rastrillar los escombros en busca de supervivientes.

"El centro de Puerto Príncipe quedó destruido, es una verdadera catástrofe", declaró un habitante de la capital, que debió caminar varios kilómetros hasta su vivienda en medio de verdaderas y escenas de pánico.

El Departamento de Estado de E.U. coincidió con estas previsiones: "Está claro que hay muchos muertos", dijo su portavoz, Philip Crowley.

El sismo derrumbó varias edificaciones de la capital, entre ellas el Palacio Nacional (sede de Gobierno), la sede de la ONU, varias embajadas y la Catedral, y provocó el pánico en la población, sin que se tenga de momento un balance de víctimas mortales y de heridos.

"Creo que verdaderamente se trata de una catástrofe de enormes proporciones", indicó el embajador de Haití en Estados Unidos, Raymond Alcide Joseph, a la cadena de televisión CNN. Según las autoridades, además, los daños materiales pueden ser gigantescos.

Las comunicaciones con la isla se colapsaron tras la tragedia, que desató una alerta de tsunami para países caribeños como Cuba, las Bahamas y República Dominicana.

Un corresponsal de la agencia de noticias 'AFP' en Haití detalló que el sismo duró algo más de un minuto. Poco después, dos réplicas de 5,9 y 5,5 grados en la escala de Richter estremecieron el país, indicó el Instituto de Geofísica de Estados Unidos (USGS).

El USGS indicó inicialmente que el movimiento telúrico fue de magnitud 7,0. Además, subrayó que el temblor se registró a 16 km de la capital y a 27 km de Petionville (sureste), a una profundidad de 10 km.

Para medir la potencia de un sismo, el USGS utiliza la magnitud de momento (Mw). En esa escala abierta, un sismo de 6,0 grados se considera fuerte.

El fuerte sismo, además, se sintió con gran intensidad en su vecina República Dominicana, con la que comparte la isla La Española, informaron las autoridades.

"En todos los lugares se sintieron los efectos del temblor, no se ha reportado ningún daño, pese a que hemos estado monitoreando por todos los lugares más vulnerables", señaló Luis Luna Paulino, director de la Defensa Civil dominicana a medios de prensa.


Las autoridades de Cuba realizan evacuaciones preventivas en zonas bajas de la ciudad de Baracoa, en la región oriental de la isla, donde se sintió con intensidad el terromoto que sacudió a Haití, mientras vigilan la evolución del fenómeno.

Haití, que detenta la renta per cápita más baja de toda América y que cuenta con el 70 por ciento de sus ocho millones de habitantes en la pobreza, ha sido golpeada por una serie de catástrofes naturales y convulsiones políticas en los últimos años.
Jean Max Bellerive afirmó a la prensa que teme que el balance por el potente sismo del martes en su país pueda alcanzar una cifra superior.

"Haití necesita más que nunca de la solidaridad de sus hermanos y de la comunidad internacional", declaró el embajador de Haití ante la OEA, Duly Brutus, en una sesión del Consejo Permanente del organismo.

"En nombre del gobierno lanzo un llamado a la comunidad internacional para que nos ayuden", añadió Brutus ante el resto de embajadores.

Lo más urgente es "salvar a varios miles de personas aún con vida y que se encuentran bajo los escombros", añadió Brutus.

Varios miembros civiles y militares del contingente de Naciones Unidas "están por el momento desaparecidos", narró.

El presidente del país más pobre de América Latina, René Préval, aseguró por su parte en una entrevista al diario Miami Herald que los muertos podían ser miles, aunque se negó a dar un número preciso.

"Debemos hacer una evaluación", dijo Préval, agregando que el panorama era "inimaginable".

El último terremoto de esta envergadura tuvo lugar en 1842 en la segunda ciudad del país, Cap Haitien, que quedó prácticamente arrasada, recordó el diplomático ante la OEA.